nota: Cró! – Pera
Cró! han nacido para tocar juntos. Y también han nacido para grabar este disco. Juguemos a los titulares: cuatro virtuosos, monstruos de la formación musical (varios de ellos físicos, investigadores, profesores universitarios), se afanan en alejarse del academicismo. Digámoslo mejor: se agarran al rock en todas sus vertientes, del progresivo al grunge, de la experimentación matemática al clásico. Huyen del aislamiento y se reinventan, y el proceso es cada vez más rápido, más violento, cada vez es una cebolla con más capas.
Hay un gigantesco cambio en Pera y es mucho menos evidente que los cambios que se pueden observar a primera vista. Éstos sí son reseñables, sí son señalables: se ha suavizado su planteamiento rítmico, dando paso a la profundidad armónica. Se ha abierto la puerta a la expresión literaria. Se ha limado cada detalle compositivo y de ejecución hasta el límite de lo sano. Y, sobre todo, se ha ganado espacio, en parte gracias a su grabación y masterización (Estudios Brazil y Golden Mastering, California, respectivamente). El tercer disco de los vigueses suena, simplemente, abrumador. inmenso, poderoso, demostrando que en el arte no se debe tanto huir de la simplicidad como buscar su dosis correcta.
El cambio subyacente va mucho más allá, no sólo por la combinación de todos estos elementos (detonada,sin duda, por la integración definitiva de Cibrán Rey, con unas baterías ejemplares), sino también por la destrucción de cualquier tipo de expectativa creada al respecto.
Éste es el disco grande de los Cró! El de la gente que se hace mayor. Pero en su afán por desencorsetarse han construido algo más parecido a un nuevo lenguaje que a un edificio diferente. Son grandes, muy grandes. Y Pera es una expresión reducida a LP de 33” de esa grandeza. Una joya que reclama el puesto merecido de los vigueses en el olimpo del respeto por parte de prensa y público.
